jueves, 8 de enero de 2009

¿El PRI de regreso? (#39)

Poco a poco el PRI perdió,
Por todos sus desatinos,
El PAN no lo aprovechó,
Siguió hasta peores caminos,
La izquierda se fracturó,
¿El PRI volverá a LOS PINOS?
.
El PRI después de 70 años en el poder, fue perdiendo paulatinamente presencia en el ámbito nacional, debido a múltiples factores: la población lo consideró autoritario y corrupto, propició la impunidad y abandonó sus banderas de reivindicación social. Así, después del movimiento del 68, empezó a perder elecciones en varias capitales importantes; con la caída del sistema en 1988 logró mantener la Presidencia y los tecnócratas en el poder, nos impusieron el modelo neo liberal, que mucho ha afectado a las clases populares; en 1989 perdió la primera gubernatura (Baja California) ante el PAN. En los noventa perdió Guanajuato, Chihuahua, Jalisco, Nuevo León, Querétaro y Aguascalientes ante el PAN y el D.F., Tlaxcala, Zacatecas y Baja California Sur con el PRD, partido que se formó en 1989 con varias corrientes de la izquierda, una de las cuales correspondía a ex priístas.

En 1994 después de la firma del tratado de libre comercio, el alzamiento de los zapatistas y los crímenes de políticos, el PRI retuvo la Presidencia con una campaña en la que el miedo jugó un papel importante, pero las elecciones intermedias de 1997 y las generales del 2000 resultaron históricas, pues el PRI perdió la mayoría absoluta en el Congreso en las primeras, y la Presidencia de la República en las segundas, lo que fue posible gracias al desgaste del PRI, al slogan de FOX de sacar al PRI de Los Pinos y a que con el PAN se planteaba una alternancia pero no un cambio de estrategia económica.

La debacle continuó y perdieron los gobiernos de Morelos, Chiapas, Yucatán, Michoacán, San Luis Potosí y Guerrero. Al llegar a las elecciones del 2006 el derrumbe fue mayor, al quedar muy por abajo del PAN y del PRD en la elección Presidencial (22% contra 35%) y quedando como 2ª. y 3a fuerza política en el Senado y en la Cámara de Diputados respectivamente. En este caso, si existía la posibilidad real de un cambio de rumbo económico, por lo que el slogan de que no llegara el PEJE a Los Pinos, los errores del PEJE y las irregularidades en el proceso, ayudaron al PAN a repetir en la Presidencia.

De entonces para acá, ha sucedido el raro pero explicable fenómeno de que el PRI ha recuperado terreno. En 2008 hubo elecciones en 6 estados y obtuvo cerca del 40% de los votos, contra 25% del PAN y 17% del PRD. El PRI fue el gran ganador al triunfar en 81 de 115 diputaciones, en 115 de 198 Ayuntamientos y en 4 de 5 capitales. El PAN fue el gran perdedor, pues siendo el partido en el poder, perdió participación y perdió posiciones; ya que solo obtuvo 3 diputaciones y 18 Ayuntamientos. Estos resultados hay que ponderarlos pues las elecciones no fueron en entidades panistas; sin embargo, vienen después de la pérdida del Gobierno de Yucatán en 2007. El PRD volvió a su participación histórica del 17%, demostrando una vez más lo difícil que es mantener unida a la izquierda, pues su proceso interno resultó desaseado, largo y cuestionado y dejó al partido fracturado.

El PAN ha demostrado incapacidad para gobernar y “falta de honestidad”. Indicadores internacionales ubican al gobierno con muy alto nivel de corrupción. El PRD quedó dividido y debilitado. Así, el PRI sin definir ideología, ha venido flotando como partido ambiguo de centro, transmitiendo la idea de que permite y propicia la negociación, con lo que no solo ha recuperado terreno, sino que muchos analistas lo señalan como el favorito para la elección intermedia en 2009 e incluso para la presidencial del 2012.

La lucha de los partidos es por el poder, no por el país. Se requieren con urgencia cambios de fondo, que no han sido planteados por los partidos y ese hueco alguien lo llenará. Las elecciones intermedias cambiaran la correlación de fuerzas, pero no resolverán los problemas del país. Habrá también elecciones locales y para Gobernador en Querétaro, S. L. Potosí, Campeche, Colima, N. León y Sonora, de las que nos ocuparemos más adelante.

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