jueves, 27 de mayo de 2010

Querétaro, un Estado competitivo

Competitivo El Estado,
Ya está en el tercer lugar,
Querétaro se ha esforzado,
Y ahora vuelve a mejorar,
Mientras México atrasado,
Sólo se le va en bajar.

Existen diversas instituciones y distintas metodologías para medir la competitividad de una nación respecto a otras, o la de una entidad federativa en relación a las demás.
El Instituto Mexicano para la Competitividad A.C. (IMCO) fundado en 2003, es un centro de investigación aplicada independiente, que estudia fenómenos económicos y sociales que afectan la competitividad. A partir de 10 subíndices (Sistema de derecho confiable y objetivo; Manejo sustentable del medio ambiente; Sectores económicos en vigorosa competencia; Sociedad incluyente, preparada y sana; Economía estable y dinámica; Sistema político estable y funcional; Mercados de factores eficientes; Sectores precursores de clase mundial; Gobiernos eficientes y eficaces; Aprovechamiento de las relaciones internacionales) y 120 variables define un índice de competitividad. En 2008 de todo el país, Querétaro ocupó la séptima posición.

Por otra parte, el Instituto Tecnológico de Monterrey ha desarrollado una metodología utilizando 196 variables relacionadas con los rubros de desempeño económico, desempeño gubernamental, eficiencia en los negocios e infraestructura. Obtienen un índice de competitividad definido como el ambiente creado por una economía de mercado, para desarrollar actividades económicas exitosas que permitan generar valor agregado, que a su vez genere riqueza y bienestar. En su informe “Competitividad de los Estados Mexicanos en 2010”, Querétaro se ubica en tercer lugar, después de Nuevo León (segundo) y el Distrito Federal (primero).

Estas son buenas noticias para los que vivimos aquí, pero las mismas en adición a la percepción general de buena seguridad, propiciará en los meses futuros una mayor migración de familias y trabajadores a este Estado, lo que presionará la demanda de vivienda, escuelas, urbanización y en general de todos los servicios.

Por otra parte y con relación a nuestro país en su conjunto, la situación es distinta, ya que de acuerdo a indicadores internacionales México ha venido disminuyendo año con año competitividad en relación al resto de los países. Tomemos como ejemplo el “Índice de Competitividad” desarrollado por el Institute for Managment Development IMD (importante escuela de negocios, ubicada en Lausana, Suiza), que se aplica desde 1989 para medir la competitividad de 55 países con base en 323 criterios, agrupados en 4 grupos: desempeño económico, eficiencia del gobierno, eficiencia del sector empresarial y desarrollo de la infraestructura. En 2008 Estados Unidos ocupó el primer lugar, seguido de Singapur y Hong Kong, mientras que a nivel latinoamericano, Chile ocupó el puesto 26 y México el 50. En el componente de infraestructura, nuestro país está peor, pues ocupó el 54 (penúltimo lugar).

Estas son cifras duras que reflejan una realidad. El gobierno federal mantiene una política sin resultados positivos. El Congreso no cumple su función y prefiere dejar que las cosas se deterioren más, para propiciar un cambio en el 2012. La exención del pago de la tenencia en Querétaro tuvo resonancia nacional y el gobierno estatal tiene la gran oportunidad de aplicar políticas distintas a las federales para marcar otros caminos. El programa “Soluciones” para dar crédito preferente a pequeñas y medianas empresas productivas es un ejemplo que ojalá se multiplique en el transporte urbano, el desarrollo regional equilibrado, la infraestructura, etc, usando la planeación y las políticas públicas y no dejando que el mercado resuelva las distorsiones.

miércoles, 19 de mayo de 2010

¿QUÉ TAN VIEJAS SON LAS PIRÁMIDES?

El dinero rapidito,
Es el sueño de la gente,
Pirámide o huerfanito,
Pa’ ser rico de repente,
Mejor poner un Banquito,
Robas en forma decente.

El ganar dinero rápidamente es una ilusión generalizada. Ganar poco, no tener capacidad de ahorro, vivir agobiado por las limitaciones, deudas impagables, son causas de la ilusión.

Por eso tienen éxito las loterías, los progoles, los melates. La probabilidad de ganar es bajísima, pero la gente que participa sueña que algún día acertará y cambiará su vida y como si fuera un impuesto adición, dedica parte de sus recursos a este sueño.
Un mecanismo utilizado cíclicamente por estafadores es la “pirámide”. Garantizan a la gente muy altas tasas de interés por sus ahorros. Los ahorradores, que generalmente son de clase media baja, cobran efectivamente intereses muy superiores a los institucionales durante un período importante y se convierten en los entusiastas promotores de esos mecanismos e invitan a familiares y amigos a hacer lo mismo que ellos. La pirámide crece y crece, pues los resultados están a la vista. De pronto, cuando la pirámide ya alcanzó un número muy significativo de integrantes, se derrumba y los estafadores desaparecen con las bolsas llenas de dinero.

Parece que la primer “pirámide” fue inventada en 1919 por el italiano Carlo Ponzi. Los inmigrantes italianos mandaban cupones por carta a sus familias, para cambiarlos por dinero. A él se le ocurrió crear una empresa y ofrecer por esos cupones ganancias del 50% en 45 días y del 100% pasados 3 meses. Cobraban religiosamente los intereses ofrecidos. Las viudas hipotecaban sus casas y la gente invertía sus ahorros con Ponzi. Un analista financiero investigó que las obligaciones contraídas por el italiano eran equivalentes a 160 millones de cupones y sólo había 27,000. El defraudador fue a la cárcel pero la gente no recuperó sus recursos.

En México tuvimos el boom de la Bolsa de Valores en 1987. Funcionaba como banca paralela y la gente le mostró más confianza que a la banca del Estado. Su auge era tan impresionante que sin asesoría ni prevención del riesgo que corrían, miles de pequeños ahorradores, vendieron o hipotecaron, casas, coches y metieron el dinero en acciones ganadoras de Bolsa. Diario veían las noticias en la TV para constatar que sus acciones seguían subiendo, hasta que, como debía esperarse, la Bolsa cayó de manera inesperada. Algunos vivales ganaron millonadas, mientras que miles y miles de personas perdieron todo su patrimonio.

La crisis mundial de 2008 y 2009 derivada de las hipotecas subprime tuvo el mismo principio. Préstamos hipotecarios otorgados sin garantías a clientes riesgosos, crecimiento explosivo del valor de las viviendas, préstamos adicionales hasta por el nuevo valor de la casa, emisión de documentos avalados por las hipotecas, distribución de esos documentos en el sistema financiero internacional, con el visto bueno de autoridades y calificadoras de riesgos. Se rompió la burbuja, muchos dejaron de pagar, se derrumbó el precio de las casas, los documentos quedaron sin garantía real, colapso financiero con unos cuantos banqueros y funcionarios ganadores y millones de perdedores en todo el mundo.

En diciembre pasado supimos de la increíble estafa piramidal que construyó Bernard Madoff , ex presidente de Nasdaq (National Association of Securities Dealers Automated Quotation), que arrastró a gigantes de la banca mundial. Las pérdidas propias y de sus clientes fueron 10 mil millones de euros, por operaciones financieras con nombres rebuscados (estafas).

La intermediación financiera es utilizada como casino, en lugar de apoyar a empresas productivas. El efecto tequila, el efecto tango, ahora Grecia. Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional apoyan para que no salgan afectados los banqueros internacionales, los que se hinchan de dinero en complicidad con las autoridades, nada aportan a la economía, no hay responsables y la gente pobre de los pueblos tiene que pagar por los platos rotos.

miércoles, 12 de mayo de 2010

¿NOS VAN A DAR OTRA CALENTADITA?

El clima deteriorado,
Por acciones del humano,
El planeta calentado,
Ya casi nada está sano,
Reuniones sin resultado,
Levantemos voz y mano.

Del 7 al 18 de diciembre pasado se llevó a cabo en la Ciudad de Copenhague, Dinamarca la 15a Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP15), de la que surgió un documento denominado acuerdo de Copenhague, en el que se señala que deberán reducirse drásticamente las emisiones globales de dióxido de carbono –principal causante del calentamiento global– para que el aumento de la temperatura global se mantenga por debajo de los 2°C, lo que resulta muy loable; sin embargo, no se incluyen ni se mencionan compromisos concretos de los países para lograr ese objetivo, quedando su cumplimiento a la voluntad y capricho de las partes, sin obligatoriedad jurídica. El documento ha sido severamente criticado por gobiernos y movimientos sociales, acusando a los EEUU (nunca firmó el acuerdo de Kioto) de liderar un grupo, excluyendo a muchas otras opiniones, violando las bases del multilateralismo como la legitimidad, la transparencia, la inclusión, el proceso democrático de participación y de igualdad jurídica entre los estados.

Ante esta falta de voluntad política y de compromisos concretos, del 20 al 23 de abril pasado, en Cochabampa, Bolivia, se llevó a cabo la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra, con el propósito de analizar las causas del cambio climático y proponer medidas de fondo que posibiliten el bienestar de toda la humanidad en armonía con la naturaleza. Esta conferencia, convocada por Bolivia, fue respaldada por los gobiernos que integran la Alternativa Bolivariana de las Américas, en la cual se llegó a la conclusión de que una de las causas del cambio climático es el sistema de vida que prevalece en el mundo: explotación irracional de la naturaleza; mercantilización y privatización de las tierras, recursos naturales y diversas formas de vida; sistema de producción y consumo exagerados; una lógica de competencia y crecimiento ilimitados; acumulación de riqueza en unos cuantos y negación y violación de los derechos más elementales, por lo que acordaron urgente y necesario fortalecer la vivencia y propuesta de los pueblos indígenas bajo el concepto del vivir bien, bajo principios y mecanismos que garanticen respeto, armonía y equilibrio de los pueblos con la naturaleza y que tenga como fin la vida y no el negocio; derecho al agua, al aire limpio y a la salud integral; derecho a estar libre de contaminación, polución, desechos tóxicos y radioactivos; derecho a que la naturaleza no sea alterada, ni modificada genéticamente; a la restauración plena y pronta de los daños que la humanidad ha infligido a la madre tierra.

México ocupa el lugar 12 a nivel mundial en generación de emisiones contaminantes, a la vez que forma parte de los primeros diez sitios con mayor biodiversidad en el planeta.
La próxima reunión de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el cambio climático (COP 16) se llevará a cabo en Cancún, México a fines de éste año. ¿Trascenderá lo planteado en Cochabampa para reencauzar por la vía multilateral y con la participación efectiva de todos los Estados el reconocimiento de que no se trata de un juego y que lo que está de por medio es la sobre vivencia de la humanidad y de que se deben tomar compromisos serios para re establecer el equilibrio entre la producción, el consumo y la naturaleza?, o ¿veremos que los países industrializados, seguirán mangoneando y tomando medidas bajo una lógica mercantilista, individualista y hasta entreguista a corporaciones internacionales? Hagan sus apuestas.

Los grupos privilegiados y las grandes empresas, con la complicidad de las autoridades, ganan mucho dinero contaminando y hasta ahora tienen la posibilidad de beber y respirar agua y aire limpios, aunque gasten mucho dinero en ello y no tienen conciencia del problema, mientras que a la mayoría de la población le llega, si bien le va, agua contaminada y es a la que sufre los estragos de las inundaciones, de la polución y de los alimentos contaminados.

miércoles, 5 de mayo de 2010

EL ORDEN DE LOS FACTORES ALTERA EL PRODUCTO

Hay un fuerte desplegado,
Critica a los negativos,
Yo estoy también preocupado,
Por los disque positivos,
Falta un grupo preparado,
Crítico y propositivo.

Terminó el período de sesiones en el Congreso Federal y los resultados parecen ser muy pobres. Las leyes que aprueba una cámara (diputados o senadores) es congelada o pospuesta por la otra; otras leyes no son aprobadas ni por una ni por la otra; pero lo que es más grave es que los asuntos de mayor interés para la mayoría de la población ni siquiera se discuten por los que se supone nos representan.

La semana pasada se publicó un desplegado en los periódicos, firmado por 63 personas disímbolas, titulado “No a la generación del no”, con la siguiente declaración: “Trece años llevan detenidas las reformas de fondo que el país necesita. Hay negación y parálisis. Las fuerzas políticas tienen detenido a México”.

Agregan: “Quien se opone a todo está a favor de nada. Si estuviéramos en el paraíso, el cambio sería riesgoso, pero ¿estamos en el paraíso? ¿No hay nada que cambiar? ¿No hay nada en las reformas políticas propuestas por el Ejecutivo que atraiga a sus opositores? ¿Trece años de parálisis no bastan?

Es claro que el estancamiento se ha originado por la tensión entre polos opuestos, uno el que ahora llaman la Generación del no y que no aprueba nada y otra menos mencionada que sería la Generación del sí (¡sí, señor Presidente. claro que sí!), que es la que da por sentado que cualquier cosa, la que sea, significa avances.

En el Congreso existen muchas iniciativas sobre reforma del Estado, procesos electorales, partidos políticos, reformas económicas, que no han surgido del Ejecutivo y que tampoco han sido suficientemente discutidas y mucho menos aprobadas. La gente está desesperada, desesperanzada, angustiada, por la precariedad de los empleos, por la carestía de la vida, por la inseguridad creciente, por la falta de respuestas de la autoridad y muchas veces lo que escucha de la clase política es que no avanzan las reformas de fondo que México necesita, pero ¿Cuáles son estas?

El intercambio público, si se quiere hacer productivo, requiere diagnósticos mucho más complejos que el simple señalamiento de desencuentros. Muchas de las iniciativas enviadas por el Ejecutivo han sido imprecisas e insuficientes, por lo que no se puede simplemente descalificar a los que disienten de las mismas.

En el desplegado se concluye: aprueben las reformas y demos inicio al debate de fondo”… “Avancemos juntos, para luego debatir juntos”. ¿El orden de los factores no altera el producto? Yo creo que cualquier proceso racional debe ser inverso a lo planteado, ya sea a nivel familiar, empresarial y sobre todo nacional, o sea, detectar los problemas, proponer soluciones, debatir sobre puntos de vista diferentes, llegar a consensos, ajustar propuestas de solución, aprobarlas e implementarlas.

No nos dejemos llevar por la reacción, la improvisación, la ignorancia, el corto plazo, la corrupción y la incertidumbre, basta de generaciones del no, pero también de generaciones del sí. Formemos, aprovechando a la gran cantidad de gente que sabe y que no es escuchada, la “Generación de las propuestas” con disposición y capacidad para debatir y llegar a acuerdos entre quienes piensan distinto o sostienen intereses encontrados, para llegar a las verdaderas reformas de fondo que requiere nuestro país para salir de tanta crisis y que seguramente serán diferentes a las que el Ejecutivo ha venido defendiendo e impulsando. ¿Usted qué opina?