SUCESIÓN PRESIDENCIAL ADELANTADA

ECONOMÍA SIN CERA
La ley dice que es temprano,
Para la presidencial,
Varios levantan la mano,
Madrugar es lo esencial,
Olvidar es poco sano,
La prioridad nacional.

Todo parece indicar que estamos viviendo una sucesión presidencial adelantada. Aunque los procesos internos de los partidos indican que deberán elegir a sus candidatos hasta el último trimestre del año próximo, la caballada se está moviendo en forma clara y activa.

Peña Nieto del PRI, lleva ya varios años como candidato visible, al que acusan de estar fuertemente apoyado por los medios electrónicos de comunicación y al que las encuestas colocan siempre como favorito, muy por encima de Beltrones y de Beatriz Paredes, los otros dos mencionados por miembros de ese partido. Se dice que el 20 de noviembre próximo dará a conocer su Proyecto de Nación.

Por lo que toca a la izquierda, López Obrador lleva casi 4 años recorriendo todos los municipios de México, creando comités de lucha por la economía popular, con un movimiento que aglutina a mucha gente, ya que parece poseer aún, la simpatía de los más necesitados y de los que claman justicia y ante ellos anunció recientemente su intención de volver a competir por la Presidencia y por otro lado, durante las últimas semanas, Marcelo Ebrard, el Jefe del Gobierno capitalino, ha estado muy activo en entrevistas y giras, en las que reconoce también su interés en ser candidato e insiste en que está vigente el acuerdo con AMLO para que cuando llegue el momento, el que esté mejor posicionado sea el candidato único de la izquierda.

Curiosamente por el lado del PAN, partido en el poder, la caballada está flaca y a estas alturas no se ve al personaje que pueda competir con éxito en la contienda. Se mencionan como posibles a Santiago Creel y a varias personas cercanas al Presidente como Heriberto Félix Guerra, Secretario de Desarrollo Social, casado con una hija de Clouthier; a Ernesto Cordero Arroyo, Secretario de Hacienda; a Josefina Vázquez Mota, ex Secretaria de Educación y actual coordinadora de los diputados del PAN; a Javier Lozano, Secretario del Trabajo y a César Nava, Presidente del PAN y diputado.
Dos eventos importantes previos a las elecciones del 2012 son los comicios en Guerrero y sobre todo las elecciones del 2011 para gobernador en el Estado de México, en las que el PAN y el PRD siguen trabajando para lograr una alianza que les permita proponer a un candidato que enfrente al que apoye Peña Nieto, animados por los resultados en Puebla, Oaxaca y Sinaloa de mediados de este año, ya que si logran ganar, minarían sensiblemente las posibilidades de que Peña Nieto sea postulado por su partido. La ley recientemente aprobada en ese estado impide las candidaturas comunes, pero no las alianzas.

Aunque los partidos hablan de que es impensable una alianza PAN-PRD para la elección presidencial, yo pienso que si la logran para el Estado de México y les funciona, habrá muchas posibilidades de que la intenten en el 2012 para tratar de evitar que el PRI regrese a Los Pinos y el candidato más probable podría ser Ebrard, razón por la cual él apoya las alianzas, aunque no hay que olvidar la influencia de Elba Ester en los procesos electorales y a su prospecto Rafael Moreno Valle, ganador en Puebla y que puede surgir como alternativa si se complican las cosas para Ebrard; sin embargo, López Obrador se opone a esa estrategia y amenaza con proponer un candidato de su movimiento en el Estado de México y él mismo para la presidencial del 2012, con apoyo del PT y alguna parte de otras fuerzas de izquierda, sabiendo que las posibilidades de triunfo de la izquierda serían casi nulas, al presentar dos candidatos divididos, pero lo que AMLO pretende es presionar a la izquierda aliancista, para que no aparezca asociada con sus enemigos históricos de la derecha y convencerlos de que la única forma de tener posibilidades de ganar es formando una gran alianza entre todas las fuerzas de la izquierda que hoy se encuentran fracturadas y divididas.

El Presidente de la República no quiere quedarse fuera de la pelea y ya se subió al ring descalificando a uno de los candidatos, lo que puede volver a enrarecer el ambiente político como en la era de Fox. Se espera una lucha complicada que tendrá que ser manejada con inteligencia por los órganos electorales.

No soy pesimista y me gusta presentar propuestas, pero desgraciadamente en este caso, veo que los próximos dos años se sumarán a los perdidos y el país continuará con sus problemas económicos, sociales, de inseguridad, de corrupción e impunidad, ya que el Presidente, los partidos y los políticos, dedicarán todo su esfuerzo a tratar de ganar las elecciones, sin una visión de Estado y cualquier propuesta que se presente la juzgarán de acuerdo a sus efectos en la imagen de tal o cual candidato y tal o cual partido, sin importar los efectos positivos o negativos para el país y para la mayoría de su población.