¡Que bonita familia, que bonita familia!

Entrevista a ex Presidente,
Cochinero delató,
¿Qué pasaba por su mente,
Que a muchos los asustó?
¿Se arrepintió de repente?
Lo dicho ahí se quedó.

Ya señalamos en esta columna que nuestro país atraviesa por varias crisis: económica, seguridad pública, ambiental, diplomática, confiabilidad en las instituciones, gobernabilidad; sin embargo, cada una sigue creciendo pues se percibe claramente que existe una grave división y enfrentamiento entre las elites, así como una ausencia de autoridad que meta orden.

La periodista Carmen Aristegui solicitó una entrevista con Miguel de la Madrid como parte de un libro que tiene en elaboración. Se la dieron el 15 de abril pasado en el despacho de la casa del ex Presidente. Parte de esa entrevista, fue trasmitida la semana pasada por la periodista, en su programa matutino y causó conmoción entre la clase política y económica del país, de tal magnitud, que unas horas después, la periodista recibió sendas cartas del ex Presidente entrevistado y de quien lo sucedió en el poder (parece ser que redactadas por la misma persona), en las cuales se trata de desacreditar la entrevista y los conceptos expresados, bajo el argumento falso de enfermedad e incapacidad del entrevistado.

¿Qué dijo que causó tanta movilización? La verdad, parece que nada nuevo, aunque en labios de un ex Presidente, resultó una bomba. Que está arrepentido de haber puesto a su sucesor, que no tenía suficiente información sobre su moralidad y la de su familia, que su sucesor se llevó la mitad de la partida secreta y que los hermanos tenían tratos con narcotraficantes y que uno de ellos hizo muchos negocios y dinero con tráfico de influencias, cuyo producto monetario fue depositado en Suiza, que el sistema requiere para sobrevivir que los que lleguen al poder encubran a los anteriores y muchas cosas más. En la carta de De la Madrid, firmada aparentemente por la presión ejercida por sus hijos y por sus hijos políticos, él mismo señala que no está en buenas condiciones de salud y no tiene valor lo que dijo, mientras que Salinas, el aludido, descalifica los dichos por haber sido expresados por una persona enferma y señala que la justicia exoneró a él y a su familia. Como diría Pompín Iglesias: ¡Que bonita familia, que bonita familia!

En la carta de Salinas también lanza un reto velado contra empresarios, políticos, intelectuales y periodistas, recordándoles que fueron beneficiados de la famosa partida secreta. ¡Ay nanita!

La inminencia de los comicios federales provoca que los distintos partidos traten de utilizar en su beneficio cada uno de los alborotos y pleitos de la elite. El Presidente Nacional del Pan ya señaló que no hay que hacerles juicio político a estos personajes, sino castigarlos en las urnas, olvidando que este asunto, ya conocido por la población desde hace 15 años, ya fue castigado en las urnas en 1997 cuando el PRI perdió la mayoría absoluta en el Congreso y sobre todo en el 2000 cuando se votó por la alternancia y por el cambio y aunque Fox tuvo todo para investigar y castigar en su caso a los culpables de éste y de otros casos ¿Qué pasó?, pues acertó, no pasó nada y nadie resultó responsable de nada, como si hubiera actuado siguiendo el principio que hoy recordó De la Madrid, de no hacer olas, para mantener la estabilidad del sistema.

Ahora la gente de poder prefiere discutir el porqué de las declaraciones de De la Madrid en este momento, pues unos dicen que era una especie de testamento político para deslindarse de lo hecho por su sucesor, otros malintencionados pretenden desacreditar a la periodista por abusar, según ellos, de la confianza del ex Presidente, la oposición solicita investigar hasta las últimas consecuencias, las 2 televisoras comerciales haciendo alarde de poder, nada mencionaron de este asunto en sus noticieros principales nocturnos, queriendo ocultar el sol con un dedo y mientras, el país sigue sin rumbo. Nos acaban de recetar la noticia de que el decrecimiento económico en este año será mayor y puede llegar al menos 6% y ¿Dónde está el plan de contingencia? ¿Qué hacen al respecto el Presidente, su gabinete, el Congreso y las elites? Se vuelve a hablar de las reformas pendientes como si ellas fueran a resolver el problema. La crisis global mundial mostró el agotamiento de un sistema que aquí nuestros funcionarios y dirigentes siguen defendiendo.

El país tiene una gran riqueza pero sigue y seguirá mal administrado. La clase política seguirá con sus luchas internas, no para beneficiar a la gente sino para conservar sus privilegios. Seguirán los escándalos durante las campañas, pero nadie será culpable. Habrá algunos ganadores y la gran mayoría seremos perdedores.